REGALO 2: JESÚS TE SALVÓ DE TUS PECADOS
- conectarte con Dios
- Dec 17, 2024
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JESÚS NOS SALVÓ DE NUESTROS PECADOS:
Busca tu lugar especial donde puedas estar en tranquilidad , lleva café o snacks y prepárate para tener un tiempo con Dios ya sea en familia, con amigos o sol@.
Que es el pecado?
El pecado es descrito en la Biblia como la transgresión a la ley de Dios (1 Juan 3:4) y la rebelión contra Dios (Deuteronomio 9:7; Josué 1:18). La palabra “Pecado” significa en el griego, “no dar en el blanco”, “salirse del camino” o “desviarse de la verdad”.
Romanos 5:12 nos dice que a través de Adán, el pecado entró al mundo y, por lo tanto, la muerte pasó a todos los hombres, porque “la paga del pecado es muerte...” (Romanos 6:23).
A través de Adán, la heredada inclinación al pecado entró en la raza humana y los seres humanos se volvieron pecadores por naturaleza. Cuando Adán pecó, su naturaleza interior fue transformada por su pecado de rebelión, acarreándole la muerte espiritual y la depravación, la cual pasaría a todos aquellos que fueran después de él.
Es por eso que debemos entender que todos somos pecadores pero Jesús nos salvó del pecado, nos liberó de sus consecuencias y del poder que el pecado tenía sobre nosotros. Jesús nos da el poder para vencer los hábitos y vicios que nos llevan a pecar.
VERSÍCULO:
—Les aseguro que todo el que peca es esclavo del pecado —afirmó Jesús—. Así que, si el Hijo los libera, serán ustedes verdaderamente libres.
Juan 8:34, 36 NVI.
Dará a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados».
Mateo 1:21 NVI
ORACIÓN:
Jesús, Gracias por salvarme del pecado y liberarme de sus consecuencias. Reconozco que soy pecador, que hago cosas que no te agradan y que me separan de ti, pero hoy quiero pedirte que me ayudes a vencer lo que me lleva a pecar, quiero buscar mi santidad cada día, ayudame Señor, fortaléceme y revélate a mi vida para tener libertad. Decido creer que tu me ayudarás y me cambiarás. En el nombre de Jesús, Amén.
EJERCICIO PRÁCTICO
Comparte éste ejercicio con tu familia para que aprendan juntos.
Esta noche o mañana pon tu comida (cena o desayuno) y ponlo sobre la mesa.
Luego, ve al lavaplatos y llena tus manos de jabón, mucho jabón, hasta hacer espuma y sin lavarlas ve a tomar tu cena o desayuno. Intenta coger el tenedor o con tus manos intenta llevarte la comida a la boca. Es incómodo y desagradable, verdad?
Ahora ve, lavalas completamente, sécalas y regresa a la mesa. Disfruta tu comida.
En éste ejercicio, el jabón representa el pecado. Ese pecado nos separa de la bondad de Dios y de sus regalos. Dios es santo y no tolera el pecado, por eso, sólo cuando nuestro pecado es “lavado o limpiado” podemos entrar en la presencia de Dios.

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