Día 21: El malvado obtiene ganancias ilusorias; el que siembra justicia asegura su ganancia.Pr 11:18

La justicia conduce a la vida porque quien la sigue vive en plenitud cada día. Según el diccionario justicia está definida como un conjunto de valores esenciales sobre los cuales debe basarse una sociedad y un estado, estos valores son el respeto, la equidad, la igualdad y la libertad; según un filosofo justicia es la constante y perpetua voluntad de darle a cada quien lo que le corresponde. Pero a veces nos preguntamos y yo como debo ser justo?

Actuar con justicia algunas veces no nos resultará sencillo, pero siempre que nuestro corazón este dispuesto a agradar a Dios podremos identificar cuando debemos aplicar esa justicia entonces tendremos la oportunidad de elegir ser justos.

Vamos a un ejemplo práctico, estás preparándote para un huracán o una tormenta y debes ir al supermercado a comprar víveres para subsistir al menos 6 días, pero cuando llegas te das cuenta que un anuncio del establecimiento dice que máximo pueden llevar dos cajas de agua y máximo 6 latas de atún por familia. En ese momento estoy seguro que tienes un pensamiento parecido a esto: porque cada uno de mi familia mi esposa y mis 3 hijos no tomamos dos cajas de agua y 6 latas de atún y vamos cada uno a una caja diferente con eso tendremos toda el agua y el atún que necesitemos? Pues allí está la oportunidad de actuar con justicia. Si analizamos ese aviso de límite de consumo está puesto porque la cantidad disponible de agua y atún quizás no sea suficiente para surtir a toda la comunidad, así es que en vez de pensar en hacer alguna trampa deberías pensar en que cada uno reciba lo que le corresponde y confiar en que Dios te proveerá lo suficiente. Si lo ves en el mundo natural suena ridículo y cada uno debe buscar como subsistir, pero no debes hacerlo por lo que ves y para los hombre sino para Dios, el si está viendo lo que pasa y como tu corazón está juzgando y decidiendo.

Siempre toma el camino de ser justo aunque no sea suficiente para ti, Dios lo reconocerá y guardará de ti y tu familia y hará que tanto el agua como el atún sean suficientes para ti y tu familia, siempre ganaras cuando decidas actuar con justicia.

Oremos: Precioso Dios, te doy gracias por enseñarme cada día a ser justo, gracias porque me has perdonado las muchas veces que he actuado injustamente cuando he pasado por encima de otros por buscar mis intereses. Hoy me pongo a cuentas contigo y decido comenzar a pensar en función de la justicia, entendiendo que no vivo solo en este mundo, sino que soy parte de tu plan, y esto significa que aunque a veces parezca injusto para mí, tu eres mi justicia y mi razón. Gracias por tu compañía y cuidado. En el nombre de Jesús. Amén