Día 13: Deléitate en el Señor, y el te concederá los deseos de tu corazón. Salmo 37:4

David nos llama a deleitarnos en el Señor y a entregarle todo lo que tenemos y hacemos. Pero, ¿como hacemos esto? Deleitarse significa experimentar gran placer y gozarse en la presencia de alguien. Esto sucede únicamente cuando conocemos muy bien a esa persona. Por lo tanto, para deleitarnos en el Señor, debemos conocerle mejor. El conocimiento de su gran amor por nosotros nos dará deleite.

Dios quiere llevar nuestras cargas, pero a menudo continuamos llevándolas nosotros aun cuando decimos que confiamos en Él. Confía en que la misma fuerza que te sostiene a ti, puede también llevar tus cargas. Siempre antes de dar el primer paso consulta a Dios, como lo haces? Entra en tu cuarto y cierra la puerta que está detrás de tí y ora al Señor, cuéntale con detalle que quieres hacer como si el estuviera allí y te estuviera escuchando y para esto necesitas fe. De ese momento en adelante debes entender que todo lo que pase estará bajo su control y que él estará guiándote, incluso si sale mal.

Oremos: Dios de los cielos, quiero conocerte más, anhelo acercarme a ti cada día y aprender como hacer grandes cosas para ti, hoy te entrego cada una de las cargas que llevo sobre mí, cada uno de los proyectos que debo afrontar y cada una de las personas que están cerca de mí para que tu me guíes en el camino y puedas transformarlo en lo que tu quieres para mí, así sabré que todo lo que suceda estará bajo tu control. En el nombre de Jesús. Amén.